Dos duplas modernas, con capacidad para 70 personas e impulsadas por baterías de litio jujeño (que, a su vez, se recargan con energía solar), están próximas a deslizarse por las vías que van desde Volcán hasta Maimará, en lo que representa el primer tramo de un trayecto que culminará próximamente en Tilcara, para luego continuar hasta Humahuaca y, finalmente, hasta La Quiaca.
“El último viaje en tren acá fue en marzo de 1993; yo nací en julio de 1993, es decir, nunca vi correr un tren en la Quebrada. Por eso, formar parte de esto me genera mucho orgullo: es un hito”, asegura Emiliano Rodríguez, coordinador ejecutivo de la Unidad Ejecutora Provincial Tren Jujuy – La Quiaca. La emoción de Rodríguez es compartida por los habitantes de la zona que, en los orígenes de este proyecto, se mostraban escépticos con su concreción.
No era para menos: muchas promesas acerca de un regreso triunfal del tren habían quedado en la nada. El rumbo de esta historia, que empezó a gestarse allá por 2015 de la mano del exgobernador Gerardo Morales, se asentó en 2022 cuando por fin comenzaron las obras con la reposición de vías del abandonado ramal C del Ferrocarril Belgrano, la construcción de terraplenes, puentes y estaciones.
El recorrido
El gobierno de la provincia de Jujuy invirtió alrededor de 40 millones de dólares para reponer las vías del abandonado ramal C del Ferrocarril Belgrano. Se refaccionaron estaciones y se construyeron nuevas dependencias.
Parte de la alegría de los jujeños por el regreso del tren ya se había visto en noviembre de 2023, cuando las duplas arribaron a Volcán, a través de la Ruta 9, donde se apostaron cientos de personas para celebrar. Atrás había quedado un viaje de más de 1.500 kilómetros desde el puerto de Zárate.
Los camiones “tipo carretón” atravesaron Perico, Palpalá y San Salvador de Jujuy, superando obstáculos físicos que obligaron a adoptar desvíos, para luego tomar rumbo norte hacia Bárcena y finalmente llegar a la estación de Volcán, donde fueron recibidos por vecinos y pobladores de localidades que, entre lágrimas y expresiones de euforia, le dieron la bienvenida al nuevo tren que promete revolucionar esta zona.
Pero además, el tren solar jujeño se propone ser un servicio flexible, permitiendo a los viajeros subir y bajar en diferentes estaciones a lo largo del día (el boleto tiene una duración de 12 horas). Por ejemplo, un viajero puede subirse en Volcán, bajar en Purmamarca, pasear por el magnífico Cerro de los Siete Colores, para luego volver a subir, seguir viaje hacia Maimará y retornar a la tardecita a Volcán.
Según especula Juan Cabrera, presidente del Ente Autárquico Tren Solar de la Quebrada, “en poco tiempo el tren solar de la Quebrada será referente y el modelo a seguir de todos los trenes turísticos del país y de la región, convirtiéndose en un caso positivo de estudio sobre cómo incentivar un atractivo turístico sin descuidar el medio ambiente”.
La dimensión del “hito”, como lo califica Rodríguez, está signada por su singularidad. Se trata del segundo tren a batería del mundo (el primero, por poco, está en Alemania), y el primero de su tipo que funciona a más de dos mil metros de altura. Las duplas fueron construidas por la empresa china CRRC Tangshan. “Fue un gran desafío para ellos también”, advierte Rodríguez. “Tuvimos reuniones con las principales empresas de transporte ferroviario del mundo, pero la escala que les propusimos no les servía; CRRC tomó la iniciativa y se animaron con el objetivo de sentar un precedente y vender muchos trenes más de este tipo”, agrega.
Al respecto, durante la presentación realizada en diciembre de 2023, el embajador de China, Wang Wei, resaltó que CRRC “es pionera en transporte de tipo tren ligero, que va a aprovechar plenamente los abundantes recursos de energía solar y de litio de Jujuy”, con lo cual están “apoyando la economía verde, a bajar los niveles de dióxido de carbono ofreciendo la experiencia de un viaje cómodo y conveniente”.
Si bien el tren puede llegar a 90 km/h, sólo circulará entre 35 y 50 km/h. Con su techo vidriado y sus amplios ventanales, el objetivo es que sea panorámico.
Las particularidades de este tren son parte indivisible de su atractivo, en especial, sus ventanales panorámicos y el techo vidriado que permiten una experiencia amplificada e inmersiva entre los colores de la Quebrada. Las baterías (que se cargan en 25 minutos, al igual que las de un auto eléctrico), tienen una autonomía de entre 100 y 120 kilómetros, y la capacidad de levantar hasta 90 km/h. Sin embargo, este tren circulará a una velocidad de entre 35 km/h y 50 km/h porque el objetivo es otro: una contemplación diferente de la puna jujeña. “Ves el paisaje de otra manera, se aprecian cosas que desde un auto no ves”, avisa Rodríguez. “Y además, es totalmente silencioso, la experiencia es increíble”, enfatiza.
¿Cómo funciona el primer tren eléctrico de América Latina?
El tren es 100% sustentable. Las duplas son propulsadas por energía solar y alimentadas por baterías de litio de carga rápida.
La recarga eléctrica se realiza en las plantas solares ubicada en diversas estaciones de la Quebrada de Humahuaca.
La carga completa de las baterías tarda tan solo 25 minutos y permiten una autonomía de 120 km.
A su vez, el techo está equipado con paneles fotovoltaicos que le permiten cargar las baterías a medida que avanza y llegar a una velocidad máxima de 90 km/h.
Este flujo de energía sustentable le permite hacer el recorrido con una única carga y transportar un total de 72 pasajeros. La energía se distribuye en el vagón permitiendo la carga de dispositivos móviles y pantallas.
El proyecto tiene, además, una mirada integral sobre la sustentabilidad. No sólo el tren es alimentado por energía renovable, sino también todos los servicios conexos: las estaciones, los puestos comerciales y de artesanías, bares y restaurantes. En un futuro, adelanta Rodríguez, las conexiones de transporte terrestre hacia las estaciones, también serán 100% sustentables.
¿Cómo proyecta la provincia recuperar esta inversión?
En principio, las expectativas para el desarrollo turístico en la región son altas, incluso plantean una suerte de equiparación con el legendario Tren de las Nubes de Salta. “Nosotros tenemos dos ingresos calculados”, explica Rodríguez. Por un lado, la venta de tickets y las concesiones de bares y locales de las estaciones. Por el otro, un “beneficio indirecto” para los pobladores de la Quebrada, gracias al incremento de la afluencia turística que beneficiará, en especial, a hospedajes, locales gastronómicos, artesanos y todos los servicios relacionados. “Es un proyecto súper rentable, todavía no tenemos el plazo de recupero (algo que podremos saber cuando terminemos el total de la obra), pero el beneficio es inconmensurable. Es un proyecto de promoción turística, que va a potenciar a toda la región”, amplía.
Para el secretario de Turismo de Jujuy, Diego Valdecantos, se trata de una oportunidad histórica para potenciar el recurso turístico de la región. “Esto va a ser un antes y un después para el turismo en Jujuy”, dice. “Tenemos la expectativa de un crecimiento muy grande de la demanda turística porque es un producto icónico: en cada lugar donde lo presentamos genera mucha expectativa”, añade.
Valdecantos cree que el principal activo de este tren está en el corazón de su formato: la sustentabilidad. “Pero además, hablamos de un tren que recorre un sitio que es Patrimonio de la Unesco, como es la Quebrada de Humahuaca”, indica. El secretario de Turismo jujeño pone el acento también en la necesidad de que este tren traccione el desarrollo en cada uno de los pueblos por donde pasa: “Se está trabajando con los prestadores para que haya una mayor cantidad de servicios y para que el pasajero pueda disfrutar no solo de los paisajes que tiene la región sino de su cultura: nuestro sueño es que haya desarrollo y empleo de calidad en todo el trayecto”.
Rodríguez aclara que el servicio también será muy utilizado por los pobladores de la zona, que tienen disponible una tarifa diferencial, al estilo del tren que une Cuzco con Aguas Calientes y que permite llegar al Machu Picchu. “El pasajero de la Quebrada lo va a usar como transporte”, dice, sin dudarlo.
Pero además, el gobierno de Jujuy busca integrar la producción de las baterías de litio, un mineral que se extrae en la Puna, pero que se exporta a China. “Queremos integrar toda la cadena acá, que las baterías que se usan para el tren, se produzcan en la provincia”, indica. En paralelo, Jujuy está construyendo un nuevo parque solar en Humahuaca, cuyo objetivo es alimentar a toda la población de la Quebrada, incluyendo al tren. “Esto forma parte de algo integral, no es un proyecto aislado”, culmina Rodríguez.
Texto de Franco Spinetta
