Un hombre armado con un arco y flechas mató e hirió a varias personas este miércoles en Kongsberg, en el sureste de Noruega. Luego fue detenido, según anunció la policía.
«Lamentablemente hay muertos», dijo Øyvind Aas, funcionario de la policía local, en una conferencia de prensa. La prensa local informó extraoficialmente que serían al menos cuatro las víctimas fatales.
«El hombre que cometió este acto fue detenido por la policía y, según lo que sabemos, sólo hay una persona implicada», añadió. Hubo una confrontación entre los agentes que lo detuvieron y el agresor, aunque aún no se difundieron las circunstancias del enfrentamiento.
La policía noruega afirmó el miércoles que no descarta que se haya tratado de un acto terrorista.
«Al ver cómo sucedieron los hechos, es natural evaluar que se trató de un ataque terrorista», declaró, Aas, en declaración ante la prensa. «El hombre detenido no ha sido interrogado y es pronto para pronunciarse sobre los motivos del ataque».
El ataque, según informa la agencia AFP, se desarrolló cerca de las 18.30 en varios puntos del centro de la ciudad de Kongsberg.
De acuerdo a los primeros reportes, el agresor iba disparando flechas a sus víctimas mientras circulaba a pie. También atacó en el interior de un supermercado Coop Extra.
La policía no dio aún mayores detalles sobre el sospechoso, salvo que se trata de un hombre y que fue llevado a la comisaría de la ciudad vecina de Drammen. Según el canal TV2, el también tenía un cuchillo y/o varias otras armas.
«No estamos buscando a otras personas», dijo Øyvind Aas.
Los heridos fueron hospitalizados. Por el momento no se conoce ni su número ni su estado.
Según informa, por su parte, la prensa local, la Dirección de Policía emitió una orden nacional de armamento para todos sus efectivos.
Esta medida se aplica para aumentar la preparación y la capacidad de respuesta de la policía, afirmaron desde la entidad de seguridad en un comunicado de prensa .
«Es una tragedia absolutamente espantosa. La forma en que uno no piensa puede suceder en Kongsberg. Así que ahora solo tenemos que manejarlo de la mejor manera posible, dijo la alcaldesa de Kongsberg Kari Anne Sand.
Las autoridades instaron a la población a permanecer en sus casas y varios barrios fueron acordonados, mientras la televisión local mostraba un gran despliegue de policías fuertemente armados y ambulancias.
También se enviaron al lugar un helicóptero y un equipo de desminado. Y se alertó al Servicio de Inteligencia Nacional (DIS).
La Policía informó que desplegó un amplio operativo en la zona porque el atacantes se movió en un área extensa. «Estamos trabajando, entre otras cosas, para asegurar pistas y recopilar la mayor cantidad de información posible sobre lo sucedido», detallaron fuentes oficiales.
Noruega, un país generalmente pacífico, ha sido escenario de ataques de extrema derecha en el pasado.
El 22 de julio de 2011, Anders Behring Breivik mató a 77 personas al detonar una bomba cerca de la sede del gobierno en Oslo, antes de abrir fuego en un mitin de las Juventudes Laboristas en la isla de Utøya.
En agosto de 2019, Philip Manshaus disparó contra una mezquita en las afueras de Oslo, antes de ser sometido por la multitud, sin que hubiera heridos graves. Antes del ataque abatió por racismo a su hermana asiática adoptada.
DD
