La Secretaría de Comercio ha convocado a las principales cámaras de la industria farmacéutica para abordar los notables incrementos de precios registrados en las últimas dos semanas tras el acuerdo de congelamiento acordado entre ambas partes después de la devaluación posterior a las elecciones primarias.
El 31 de octubre marcó el fin del acuerdo entre las partes, lo que, según explican desde el sector empresarial, ha llevado a la manifestación del impacto de los cambios en los costos y las fluctuaciones en el valor del dólar.
El objetivo oficial es contener esta situación, ya que podría expandirse a otros sectores sensibles que también tienen acuerdos vigentes hasta el período electoral.
Las empresas han reconocido que desde el inicio de noviembre se han aplicado dos importantes oleadas de incrementos, con un promedio del 15% durante la primera semana y del 12% en la segunda. Según información obtenida por Infobae, cada laboratorio actualizó sus listas en función de la necesidad de recuperar márgenes tras mantener congelados sus productos durante unos 70 días, en un contexto de elevada inflación. Algunas empresas están considerando implementar más aumentos en las próximas horas. Sin embargo, estos ajustes se enfrentan a dificultades de acceso a divisas para pagos de importaciones y a la incertidumbre respecto al tipo de cambio después de la segunda vuelta electoral del 19 de noviembre.
De manera similar a lo ocurrido después de la leve subida del dólar oficial el lunes posterior a las elecciones primarias, cuando se acordó posponer los aumentos durante casi tres meses, el Gobierno busca un nuevo acuerdo con las empresas del sector. La Secretaría de Comercio, liderada por Matías Tombolini, y el Ministerio de Salud, a cargo de Carla Vizzotti, han convocado a una reunión con las tres cámaras más representativas en el ámbito de los medicamentos: Cilfa, que reúne a laboratorios nacionales; Caeme, que agrupa a los extranjeros, y Cooperala, que representa a las cooperativas.
«En principio, escucharemos a las cámaras. Poseemos información sobre los aumentos de las últimas semanas. La idea es colaborar conjuntamente para resolver esta situación, similar a lo que ocurrió cuando enfrentamos problemas con la escasez de insumos médicos», declararon fuentes de Comercio a este medio. No obstante, no ofrecieron detalles sobre si se busca retroceder en los precios o si se pretende alcanzar un nuevo acuerdo a futuro. Indudablemente, la clave radicará en el resultado de las elecciones de este domingo, especialmente si Sergio Massa es elegido presidente.
Desde un laboratorio de relevancia, comentaron a Infobae que hasta el miércoles se discutían internamente los aumentos que se aplicarían en las listas. «Tenemos tres costos importantes para considerar: el financiamiento de las importaciones en medio de los problemas para realizar pagos al exterior, los insumos y los costos laborales», afirmó la fuente. Otra empresa sostuvo que los recientes incrementos en los precios de los medicamentos «reflejan el impacto de los cambios en los costos y en las variaciones del tipo de cambio». Sin embargo, aseguraron que cada empresa evalúa su estrategia de ventas y establece los valores que considera necesarios para mantener su negocio.
En este contexto, Cilfa emitió un comunicado destacando su cumplimiento del congelamiento de precios acordado con Comercio entre el 19 de agosto y el 31 de octubre, y justificó los incrementos que se han producido desde el inicio de noviembre. «Los laboratorios farmacéuticos argentinos han respaldado en todo momento las políticas de estabilización de precios implementadas por las autoridades económicas del país y han cumplido puntualmente con todos los compromisos asumidos. Sin embargo, tras finalizar el plazo para mantener los precios estables de los medicamentos, se vieron en la necesidad inaplazable de realizar ajustes para hacer frente a una situación compleja que ponía en riesgo la sostenibilidad económica y financiera de las compañías», señaló la cámara de laboratorios nacionales.
«Los laboratorios se vieron obligados a ajustar los precios de los medicamentos tras más de 70 días de congelamiento, período durante el cual, incluyendo noviembre, los precios en general de la economía han aumentado aproximadamente un 45%. Esto se suma a la necesidad de afrontar los acuerdos salariales firmados con los trabajadores de la salud, que implican un incremento anual de salarios del 143%, y, por último, la necesidad de protegerse ante las dificultades para acceder a divisas y el entorno de gran incertidumbre cambiaria generado por las elecciones presidenciales inminentes», apuntó la cámara de laboratorios nacionales. La industria farmacéutica argentina no puede operar con pérdidas, especialmente en contextos de alta inflación, incertidumbre cambiaria y una dinámica intensa de los precios en la economía en general. Por lo tanto, los ajustes de precios actuales no tienen una motivación política o especulativa, sino que buscan ejercer la libertad de fijar precios para asegurar la sostenibilidad de la producción y el suministro, permitiendo continuar respaldando las políticas de salud oficiales hasta el momento», concluyeron.
