El gobierno respalda la actividad económica en la puna jujeña

El Ministerio de Ambiente continúa fortaleciendo los procesos de esquila de vicuñas en silvestría, con protagonismo de las Comunidades Andinas Manejadoras de Vicuñas de Yavi (CAMDVY), y el apoyo del Ministerio de Desarrollo Económico y Producción, junto al Instituto de Tecnología Agropecuaria (INTA) y la Subsecretaría de Agricultura Familiar (SAF).

De este modo, desde el Estado provincial se apuesta a a un proceso único en el país, que reúne valores culturales ancestrales, sociales, comunitarios, como el respeto del bienestar animal y la posibilidad del desarrollo económico desde una perspectiva sustentable.

En ese marco es que la comunidad de El Cóndor (Departamento de Yavi) logró concretar una jornada de chaku, de la que participaron la Ministra de Ambiente, María Inés Zigarán, acompañada del Director de Áreas Protegidas y Biodiversidad, Álvaro Núñez; la Ministra de Desarrollo Humano, Natalia Sarapura; la Secretaria de Pueblos Indígenas, Alejandra Liquín; la Coordinadora de Turismo Gastronómico del Ministerio de Cultura y Turismo, María José Gloss; el referente del INTA Miraflores, Marcelo Echenique; y la Diputada Provincial, Alejandra Elías.

“Jujuy es una de las provincias que cuenta con mayor población de vicuñas, alrededor de 130 mil, y que encontró en los procesos de esquila la posibilidad de desarrollo de las comunidades, desde una perspectiva ambiental, garantizando el bienestar animal, el respeto de las cosmovisión indígena y el aprovechamiento de tecnologías ancestrales”, expresó la Ministra Zigarán, referente del organismo que lidera los trabajos desde la Secretaría de Biodiversidad que depende de su cartera.

Luego de precisar que se trata de una de las prácticas productivas que, desde que asumió, el gobernador Gerardo Morales es que se decidió fortalecer en el interior profundo de Jujuy, a través del Ministerio de Ambiente y el Ministerio de Desarrollo Económico y Producción, en articulación con otros organismos locales y nacionales: “lo que buscamos es generar en las propias comunidades capacidades instaladas que les permitan afianzar sus economías regionales y encontrar en sus propias prácticas alternativas de crecimiento y desarrollo”.

Al mismo tiempo, la funcionaria puso en relieve que la práctica de la esquila se inscribe en el marco de la política ambiental y en los nuevos procesos de desarrollo locales que respetan y valoran la biodiversidad. Destacó igualmente que desde fines del 2015 se incrementaron el número de chakus, pasando de 4 a 27, y se aumentó también la cantidad de kilos de fibras de vicuñas y el número de comunidades que se incorporaron a los procesos de desarrollo sustentable.

En el mismo sentido se expresó la ministra de Desarrollo Humano, Natalia Sarapura, quien ponderó que “esto sin duda representa para nuestros pueblos la posibilidad del desarrollo, pero también de nuevos ingresos, crecimiento, trabajo, arraigo, en una zona como la Puna que por muchos años ha registrado situaciones de migración por falta de oportunidades que hoy el Gobierno de Jujuy está garantizando”.

Asimismo, señaló que “trabajamos en el desafío de avanzar en procesos de manufactura, ya que las comunidades están decididas no sólo a generar la materia prima, sino incluso agregarles valor a partir de su propia identidad; eso valoramos y es lo que venimos apoyando y promoviendo”.

Facebook
Twitter

Deja un comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

Scroll al inicio