Dólar. Un nuevo cartel sorprendió a los usuarios de algunos bancos

"Ya tenés tu lugar en la fila virtual". Así recibía esta mañana un banco a los usuarios de su plataforma virtual. "Debido a la gran cantidad de visitas, tenemos una pequeña demora para ingresar al online banking", se leía en el cartel

La espera era de algunos minutos, y la entidad financiera solicitaba que no se actualizara ni se cerrara la página para que el cliente no perdiera el lugar en la fila. «¡Ya casi estás!», se veía sobre el final.

Ese mismo cartel aparecía, también, cuando los clientes querían ingresar (ya dentro del home banking) a la compra de divisas, la gran «estrella» del día: hoy es 1 de octubre y debuta el cupo de US$200 «ultrarrestringido». Es la solución que ideó una de las entidades financieras para evitar el colapso total de sus plataformas. En otras, esta mañana había inconvenientes para ingresar.

Antes de las 10 no hubo mayores quejas por parte de los usuarios con respecto al home banking. Pero una vez llegado ese horario y abierta la rueda para comprar dólares en la mayoría de las entidades, la historia fue distinta y empezaron las demoras.
Los bancos sabían que hoy se iban a encontrar con una jornada caótica. Desde inicios de esta semana estimaban que las dos o tres primeras horas del día habría colapso, como cada vez que se renueva el cupo de US$200 mensual. «Van a entrar a comprar los que pueden y van a intentar por las dudas los que no pueden», decía un vocero de una de las entidades.

Cabe destacar que los bancos pueden llegar a tener algunos millones de clientes, por lo que la demanda en cada renovación de cupo puede ser muy importante.

Hoy es el debut de un cupo mensual de US$200 que está virtualmente terminado. Con las limitaciones que fueron apareciendo desde el 15 de septiembre, fecha en la que el Banco Central ajustó el cepo cambiario, se estima que, de casi 4 millones de personas que accedieron al mercado de cambios en agosto, cuando esa posibilidad se renueve hoy, el número total caerá a cerca de un millón.

Son al menos 10 las condiciones que dejan a una persona excluida del mercado único y libre de cambios (MULC). Entre las personas que no pueden comprar dólar «ahorro» están los empleados de empresas que recibieron ayuda estatal para pagar salarios (que, según fuentes oficiales, son 2,8 millones de personas), quienes cobran el Ingreso Familiar de Emergencia y la Asignación Universal por Hijo y los monotributistas que sacaron créditos a tasa cero.

Esta mañana, circulaban los «permisos denegados» que daban los bancos a quienes cumplen con alguna de esas 10 condiciones de exclusión. «Por ahora no podés comprar dólares según normativa del Banco Central y nuestra información», se leía en una de las entidades.

«Rechazado por BCRA. CUIL inhabilitado por restricciones de comunicaciones A 7105/A 7106», señalaba otra, y hacía referencia a las dos comunicaciones que restringieron aún más el mercado de cambios desde el 15 de septiembre. Otros eran más lacónicos: recibían a sus «clientes excluidos» con un breve «inhabilitado para operar».

Hay entidades que directamente eliminaron la posibilidad de comprar dólares a quienes quedaron excluidos del MULC. Es decir, la funcionalidad dejó de existir en la plataforma de esos usuarios. Hay otras que, además, están solicitando demostración de ingresos a sus clientes: sucede que, por la comunicación «A» 7105, el Central solicita a las entidades financieras que obtengan evidencia de la que surja que «el cliente posee ingresos y/o activos consistentes con el ahorro en moneda extranjera».

A esos fines, solicita que los bancos pidan documentación respaldatoria de los ingresos, de los activos del cliente y de «toda otra documentación que les permita evaluar la razonabilidad de que el cliente efectúe ahorros en moneda extranjera».

Para quienes efectivamente pudieron hacer uso de su cupo, la compra no fue tan fácil. En general, los bancos no detallan cuántos dólares tenía disponible cada cliente (ahora los gastos en dólares con tarjeta se descuentan de ese monto) y hay que ingresar «a prueba y error» la cantidad requerida hasta dar con el número permitido. Por la cantidad de operaciones por cuenta, eso puede haber generado aún más demora por la mañana.

Por: Sofía Terrile

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