En medio de la intensa controversia desencadenada por el enfrentamiento entre Independiente y Barracas Central en la Copa de la Liga, el presidente del Rojo, Néstor Grindetti, y el director técnico del equipo, Carlos Tevez, lideraron el miércoles una conferencia de prensa para denunciar enérgicamente la actuación del árbitro en el partido.
“No le debo nada a nadie. Si tengo que hablar con Tapia, lo haré como siempre lo hemos hecho. Y con Toviggino y Dóvalo, lo resolveremos personalmente, ya sea en Twitter, en la Justicia o donde ellos prefieran”, expresó Tevez en una intervención breve pero contundente, reafirmando gran parte de sus declaraciones minutos después del polémico encuentro entre Barracas Central e Independiente la noche anterior.
“Esperamos que situaciones como estas no se repitan”, añadió Grindetti, anticipando: “Vamos a tomar todas las medidas institucionales necesarias para defender a Independiente; eso no está en duda”. “No cambiaré mi postura: insisto en que nos robaron”, reafirmó Tevez con convicción, y afirmó que, si sus palabras acarrean un perjuicio deportivo para el club, estaría dispuesto a dar “un paso al costado”. Concluyó: “Independiente está por encima de los nombres, y lo último que quiero es perjudicarlo”.
El encuentro con los medios tuvo lugar en el predio de Villa Domínico luego de una reunión de más de dos horas entre el Apache y toda la cúpula directiva del club. Además de Grindetti, estuvieron presentes Cristian Ritondo, quien, aunque ocupa un puesto menor en la directiva, es uno de los máximos referentes; el vicepresidente Carlos Montaña, representante ante la AFA; el secretario general Daniel Seoane y otros directivos clave de la institución.
También asistió Federico Buceta, secretario de Educación y Cultura, quien mantiene una relación amistosa con Pablo Toviggino, tesorero y figura importante en la AFA, y quien tras el partido tuvo un duro intercambio con Tevez a través de la red social X (anteriormente Twitter). El directivo de la AFA recordó al entrenador del Rojo sus problemas para obtener el título de técnico, la lesión que causó a Ezequiel Ham en un partido entre Argentinos Juniors y Boca, e incluso mencionó la participación de Tevez en un negocio de parques eólicos cuya legalidad aún está bajo investigación judicial. Tevez, por su parte, sugirió indirectamente que Toviggino podría haberse apropiado de fondos provenientes del Mundial de Qatar y de los amistosos de la selección en China.
Grindetti aseguró que defenderá a Independiente “con toda la vehemencia posible por los cauces correspondientes”. El presidente del club de Avellaneda subrayó que “esto no es un debate mediático, sino formal, aunque la situación exige que seamos firmes en nuestras declaraciones”. El actual Jefe de Gabinete del Gobierno de la Ciudad de Buenos Aires se refirió al incidente ocurrido en el estadio de Huracán, haciendo hincapié en que “podemos aceptar decisiones interpretativas, pero el hecho de que el VAR no haya intervenido es otra cuestión, porque es ahí donde comienzan las sospechas”.
Además, Grindetti expresó el sólido respaldo de la directiva al trabajo del cuerpo técnico de Tevez: “La comisión directiva, el cuerpo técnico y los jugadores estamos unidos y fuertes”, señaló como muestra de unidad frente a lo que considera “uno de esos obstáculos que la vida nos pone. Debemos enfrentarlos y seguir adelante”.
La jugada que provocó la polémica
Transcurrían 19 minutos del primer tiempo en el estadio de Huracán, en el partido entre Barracas Central, el equipo local, e Independiente. Poco antes, Matías Giménez había marcado el primer gol para el Rojo. En un momento de dominio del Independiente, en una jugada en la mitad de la cancha, Alexis Domínguez llevaba la pelota; la adelantó un poco e Iván Marcone se lanzó a la disputa, con una entrada fuerte sobre la pierna derecha del jugador del Rojo, quien cayó aparatosamente, mostrando evidentes signos de lesión.
Inmediatamente, el árbitro Pablo Dóvalo mostró la tarjeta amarilla a Domínguez, a pesar de las protestas de todo el equipo de Independiente y del DT Carlos Tevez, quien pedía la expulsión del delantero rival. Mientras atendían a Marcone, el entrenador de Independiente instó a Dóvalo a revisar la jugada en el VAR, pero el árbitro no accedió. Tampoco hubo intervención por parte de Luis Lobo Medina, encargado de la asistencia arbitral por video.
Después de esa falta, Alexis Domínguez fue nuevamente protagonista en el partido. A los 45 minutos, Alan Cantero recuperó la pelota en la banda izquierda y la cedió a Rodrigo Insúa, quien envió un pase dentro del área para Maximiliano Zalazar. El delantero descolocó a la defensa del Rojo con un pase hacia atrás, permitiendo que Domínguez empujara el balón a la red y anotara el 2-1 parcial para Barracas Central. Fue un golazo producto de una excelente jugada colectiva, pero que posiblemente no se habría concretado si Domínguez hubiera sido expulsado por la falta sobre Marcone.
Otra jugada discutida al comienzo del segundo tiempo fue una presunta mano en el área de Barracas Central, cuando un centro impactó en la mano derecha de Facundo Mater, quien marcaba a Matías Giménez. Sin embargo, aquí no hubo una clara intención de jugar el balón ni una ocupación desmedida del espacio.
Más tarde, en la habitual conferencia de prensa, Carlos Tevez fue durísimo con el árbitro. “Nos vamos calientes. Este tipo tiene que terminarla porque no va a poder seguir. Se caga en el trabajo de los pibes. Así va a ser muy difícil seguir. Tiene antecedentes con Barracas y hoy nos robó”, fue una de sus frases.
