A pocos días del inicio del Mundial de Clubes 2025 en Estados Unidos, una delegación de la FIFA se hizo presente en el predio que Boca Juniors posee en Ezeiza para llevar adelante controles antidopaje sorpresivos en jugadores del plantel profesional.
La visita forma parte del protocolo que el organismo internacional implementa en la previa de torneos de gran magnitud y que alcanza a los 32 equipos que competirán entre junio y julio en territorio estadounidense. La selección de los futbolistas fue aleatoria y no se informó públicamente quiénes fueron los sometidos a las pruebas.
Este tipo de procedimientos ya se aplicaron previamente en competencias similares, como en la antesala del Mundial de Qatar 2022, y están alineados con los estándares de la Agencia Mundial Antidopaje (WADA, por sus siglas en inglés).
El debut de Boca en la cita internacional
El conjunto argentino, que sería dirigido nuevamente por Miguel Ángel Russo, integra el Grupo C junto a Bayern Múnich, Benfica y Auckland City. Su presentación inicial será el 16 de junio frente al conjunto portugués en el Hard Rock Stadium de Miami.
Luego enfrentará al Bayern el 20 de junio en el mismo estadio y cerrará su participación en la fase de grupos el 24 de junio ante el Auckland City, en el Geodis Park de Nashville.