Durísimas declaraciones de Jorge Brito contra el director de los árbitros argentinos

El presidente de River Plate, Jorge Brito, apuntó contra el director nacional de árbitros, Federico Beligoy, en medio del malestar general que existe en el club de Núñez por los arbitrajes de los últimos partidos.

“Me parece bien que defienda a los árbitros como secretario General de la Asociación Argentina de Árbitros, pero hoy claramente tiene una incompatibilidad de funciones teniendo ese cargo y al mismo tiempo siendo el que selecciona a los árbitros”, declaró Brito en una entrevista concedida a Mariano Closs en ESPN.

Brito hizo hincapié en la falta de “transparencia” de algunas decisiones vinculadas al fútbol argentino, entre ellas la designación de los referís de los partidos. Y también se mostró en contra de la medida con la que amenazaron los jueces de judicializar las críticas, tanto por parte de los protagonistas como del periodismo.

“No quiero calificar a los arbitrajes y por eso no quise hablar después del partido con Patronato (por Copa Argentina, no le sancionaron un claro penal con el encuentro 1-0 y luego la Banda perdió por penales). No lo hicimos nunca y no tiene nada que ver con la firma de Beligoy. Si alguien piensa que la dirigencia de Brito fue un desastre lo puede decir, del mismo modo que debe haber libertad si uno cree que un arbitraje fue un desastre”, planteó.

“Siempre creímos en tener un proceso transparente en las elecciones de los árbitros como el azar o el azar selectivo, dependiendo de las actuaciones de los árbitros. Ellos se pueden equivocar, pero todos tenemos la tranquilidad de que si eso pasa no es más que un error y no que haya algo raro atrás. Nunca es claro cuándo paran a un árbitro por errores o darle descanso. Nosotros le pedimos a la AFA más claridad en las elecciones de los árbitros y sus sanciones”, hizo público su reclamo a la conducción de la Asociación del Fútbol Argentino.

El enojo en Núñez, tanto de parte de la dirigencia, como del plantel y el cuerpo técnico, no se reduce al error de Fernando Espinoza por la mano no sancionada dentro del área en el cotejo ante el Patrón en La Rioja. Son varios los episodios que colmaron el vaso. Un detalle que no soslayan en River: no le cobran un penal a nivel local desde mayo, en ocasión de la victoria por 2 a 1 ante Platense en el Monumental. Aquella vez, Julián Álvarez tradujo en gol. Una situación al menos curiosa para un equipo que, si bien disminuyó su rendimiento, no deja de atacar, de generar situaciones para anotar o de merodear el área.

Hay un ejemplo marcado que quedó resonando en el club: el penal de Barreto a Borja en el triunfo contra Independiente en Avellaneda. Ni Fernando Rapallini ni el VAR lo advirtieron. Sin embargo, pese al error, el juez fue “premiado” con la conducción de Racing-Boca, donde volvió a cometer una falla notoria al no sancionar un remate desde los 12 pasos por mano de Jonathan Gómez. Recién ahí sí fue “penado” con una fecha de descanso.

Hay quienes sospechan puertas adentro del Monumental que algunas diferencias de opinión con Claudio Tapia, presidente de la AFA, pueden tener alguna vinculación con los fallos. Esa inquietud incluso se trasladó a las tribunas. El pasado 4 de septiembre, cuando el Millonario derrotó 2-0 a Barracas Central, el titular de la entidad que rige al fútbol argentino lo pudo comprobar. A los 25 minutos del primer tiempo, cuando el árbitro Germán Delfino demoraba en convalidar el gol de Nicolás de la Cruz mientras era revisado por el VAR, todo el estadio atronó con el “Chiqui Tapia botón”. El mensaje no pasó por alto en la sede de la calle Viamonte.

Tapia y compañía temieron el efecto rebote, que los insultos con el presidente como foco ganaran otras tribunas fronteras afuera de Núñez, máxime ante la constante polémica con el VAR, su fallida implementación, y la falta de publicación de los audios con los diálogos de la humano-tecnología, algo que Conmebol hace un día después de los encuentros. Ese “secretismo” no hace más que abonar las dudas. River, y en este caso Jorge Brito, no hizo más que ponerle voz al pensamiento generalizado en la Liga Profesional.