Foster Gillett ya invirtió millones en Estudiantes y Verón quiere un acuerdo de no menos de 30 años con el empresario estadounidense.
Estudiantes de La Plata, bajo la conducción de Juan Sebastián Verón, busca trazar un camino innovador al integrar inversiones privadas en su estructura sin convertirse en una sociedad anónima deportiva (SAD).
Este modelo, que genera controversias en el fútbol argentino, es una apuesta que busca superar las limitaciones del sistema económico tradicional.
“Llegamos al techo y ahora debemos empujarlo hacia arriba. Hoy, los clubes en Argentina dependen exclusivamente de los derechos de televisión, la venta de jugadores y los aportes de los socios. Es insuficiente si queremos competir internacionalmente”, afirmó Verón en una charla con medios nacionales.
El acuerdo con Foster Gillett, empresario norteamericano vinculado al mundo del deporte y exdirector del Liverpool, supone un cambio de paradigma. “Es una inversión histórica. Gillett aportará al crecimiento de nuestra infraestructura y al fortalecimiento del plantel profesional. Pero lo más importante es que este convenio respeta nuestros valores e identidad institucional”, enfatizó el exjugador.
El dirigente aclaró que, aunque el club recibirá capital extranjero, no se cederá el control de las decisiones deportivas ni administrativas. “Estudiantes seguirá siendo un club de sus socios. Esta inversión nos permite innovar sin traicionar nuestra historia”.
Un sistema agotado
En palabras de Verón, el fútbol argentino enfrenta una crisis estructural: “El modelo está agotado. Seguimos trabajando con una estructura que atrasa 30 años, mientras el mundo avanza”. La falta de inversión en infraestructura y las constantes fluctuaciones económicas del país limitan la capacidad de los clubes para retener talento y competir en igualdad de condiciones.
“No podemos depender exclusivamente de exportar jugadores para sostenernos. Necesitamos diversificar nuestras fuentes de ingresos, modernizar la gestión y pensar a largo plazo. De lo contrario, seguiremos siendo exportadores de promesas y no protagonistas internacionales”, sostuvo.
El desafío de liderar el cambio
Verón también destacó la importancia de trabajar en equipo con otros clubes para transformar la realidad del fútbol argentino. “No se trata sólo de lo que hagamos en Estudiantes. Necesitamos un cambio colectivo, que incluya reformas en la AFA y una gestión más transparente y profesionalizada”.
Finalmente, el presidente de Estudiantes reafirmó su compromiso con el desarrollo integral del club: “Queremos seguir siendo un modelo dentro y fuera de la cancha. Este acuerdo no es el destino final, sino el comienzo de un camino hacia el futuro que soñamos para Estudiantes”.
La iniciativa de Verón y su equipo podría marcar un antes y un después en la historia del fútbol argentino, al abrir la puerta a nuevas formas de financiamiento que respeten la esencia de los clubes como entidades sociales.
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